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Los talones están expuestos constantemente a la agresividad por la posición de ocupan en nuestro cuerpo. Luego puede caminar mucho, los pies sufren grietas que pueden causar dolor punzante y desagradable. A esto le llamamos Talones Agrietados.
Pequeñas recetas fáciles para practicar en casa para proteger, hidratar y curar a sus talones agrietados.
La miel
La miel es un ingrediente que tiene propiedades muy beneficiosas para la piel, y ayuda a hidratar y suavizar de manera efectiva.
Mezcle una taza de miel en una jarra de agua caliente.
Deje remojar los pies durante 15 a 20 minutos brindándole un masaje.
Harina de arroz
Este exfoliante de harina de arroz ayuda a suavizar la piel de los talones agrietados, callos y reduce de manera significativa este problema, mejorándolo notablemente.
Prepare una mezcla con 2 o 3 cucharadas de harina de arroz, miel y vinagre de sidra de manzana.
Remoje los pies durante 20 minutos con agua tibia y luego aplique esta pasta exfoliante con movimientos circulares suaves.
Plátano y aguacate
Esta máscara de plátano y aguacate ayuda a hidratar la piel, y los talones agrietados mejoran significativamente su apariencia.
Prepare una pasta de un plátano y un aguacate maduro.
Aplique esta mezcla sobre la piel de los talones agrietados y deje actuar durante media hora antes de enjuagar.
Limón y glicerina
Este tratamiento natural ayuda a suavizar la piel del talón y reducir significativamente la sequedad provocada por los talones agrietados.
Verter en un recipiente grande una buena cantidad de agua caliente, sal gruesa, glicerina, jugo de limón y agua de rosas.
Luego, sumerja los pies en ella durante 15 a 20 minutos.
Use una piedra pómez para suavizar los talones de la piel seca y facilitar la eliminación de callos.
Prepare una mezcla de glicerina, jugo de limón y agua de rosas, y aplicarlo directamente sobre la piel dura talones.
Colocar medias o calcetines y dejar toda la noche.
Repetir el mismo tratamiento durante cuatro o cinco días seguidos.
Vaselina y jugo de limón
La vaselina y el jugo de limón afectan profundamente la piel, ayudando a suavizar los callos y reduciendo significativamente el problema de los talones agrietados.
Remoje los talones en agua caliente con sal durante 15 a 20 minutos.
Secar bien los pies, luego cubra los talones con una cucharada de vaselina y el jugo de limón.
Cubrir los pies con calcetines de algodón y dejar durante toda la noche.